La poeta gallega Luisa Castro , ganadora en 1987 del primer Premio de poesía Hiperión , se trasladó a raíz de ello a Madrid y durante años escribió y publicó en la prensa estos textos “que forman en sí un diario de impresiones y recuerdos (…) cuyo tema era siempre el mismo: yo y mi vaga circunstancia, el vago mundo y la vaga realidad”, según confiesa en el prólogo. Tras su consolidación de su trayectoria como poeta y novelista, este libro mantiene la frescura de la primera juventud en que fue escrito y resulta una lectura reveladora y refrescante.