En palabras del autor, este nuevo poemario trata de explorar otro territorio virgen, más íntimo, el lugar habitable entre el campo y la ciudad, el amor y el cansancio, la memoria y el instante. Sabe que antes debe atravesar sin ruido, en voz baja la soledad y la nostalgia, adaptarse a su clima. Que sólo así se llega, sin ánimo de conquista, pero con la seguridad de estar lejos de este oscuro tiempo que vivimos, cerca del horizonte, de la palabra advertida en el lenguaje cotidiano, de su amor al porvenir, de su temperatura,