Parece inevitable la tensa relación entre países vecinos, y suelen primar los intereses contrapuestos, sobre la amistosa vecindad y la unión frente a terceros. España y Francia son un ejemplo de ese desencuentro. Hay que considerar casi como un dogma de política exterior el que las relaciones entre países vecinos tienen que ser malas generalmente; aunque, algunas veces, las circunstancias obligan a un entendimiento. Es decir que, por desgracia, priman las ambiciones y los intereses contrapuestos, sobre la amistosa vecindad y la unión frente a terceros. Las relaciones entre España y Francia son un claro ejemplo de ese desencuentro. José Antonio Vaca de Osma, embajador de España, es diplomático de profesión e historiador por vocación. Tras sus estudios en la Facultad de Derecho, en el Instituto de Estudios Políticos y la Escuela Diplomática, ha recorrido medio mundo en misiones y puestos de su carrera. Ha publicado libros de política, como Hacia el futuro de España, y de historia, entre otros: Los vascos en la Historia de España; Carlos I y Felipe II frente a frente; Carlos III; Historia de España para jóvenes del siglo XXI; El Imperio y la leyenda negra; La Guerra de la Independencia; Nueva Historia de Madrid, y Patriotas que hicieron España. Es Académico de las Reales Academias de Historia y de Jurispru...
