En este libro José AmÃcola enfoca el tema del camp redefiniéndolo como un gesto que exhibe una voluntad de teatralización de los fenómenos socioculturales. Este proceso, que puede llamarse posmoderno, arroja claves para entender una época y permite revisar ciertas coordenadas de la cultura del siglo XX. El texto analiza cuatro polos que tensan las diversas manifestaciones culturales: el tema de las diferencias sexuales -tratado aquà bajo el concepto de gender impuesto por las feministas estadounidenses-, el uso del pretendido buen gusto -bautizado como kitsch por los alemanes-, el modo paródico que satura las prácticas culturales, y por último, el camp, entendido como teatralidad del exceso, que pone en movimiento y cierra el cÃrculo de los otros tres polos. Gender, kitsch, parodia y camp aparecen, entonces, formando un engranaje de significación que cobra sentido en el tratamiento de la literatura latinoamericana a partir de un corte que se ubicarÃa en la obra de Borges y cuya energÃa habrÃa catapultado a autores como Puig, Cortázar, Severo Sarduy, Copi o Cabrera Infante hacia zonas más conflictivas de la constelación formada por esos cuatro polos.
