Muchas personas viven normalmente atemorizadas. Según una encuenta de Gallup y las estimaciones del Center for Disease Control tres de cada cinco mujeres afirman que el estrés es la principal preocupación de sus vidas. El 75% de los trabajadores describen su trabajo como estresante. El sesenta y ocho por ciento están preocupados por la economía y el 48% tiene miedo por su propia seguridad. El miedo se ha convertido en un estilo de vida. Estamos estresados por la inseguridad de nuestro propio trabajo o por las futuras oportunidades de empleo que tendrán nuestros hijos. Sentimos los efectos del envejecimiento mientras contemplamos a nuestros padres llegar a la ancianidad. Nos preguntamos si podremos permitirnos disfruta de un retiro y de nuestro bienestar físico. Sufrimos un exceso de exposición a la cobertura informativa de la guerra y los repetidos asaltos de los atentados terroristas están creando una parálisis psíquica. ¿Nuestro desafío? Prestar una detenida atención a nuestras emociones. Necesitamos alimentarnos y cuidar nuestras necesidades básicas para estar lo mejor y más sanos posible y poder abordar todas las crisis que nos rodean. Es hora de comer bien, dormir bien por las noches y tener tiempo para disfrutar de la vida. Te animamos a leer este libro y a renovar tu compromiso contigo mismo, con tu salud, tu felicidad y, finalmente, con tu longevidad.