A lo largo de este libro las autoras manifiestan una muy valiosa apertura, que va desde la construcción psicopedagógica rigurosa hacia el riquísimo campo del Test de Bender. Conducir esta producción hacia el campo del aprendizaje es otra conquista de la experiencia de las autoras, que les permitió no sólo fundamentar, sino también desarrollar una escala de desarrollo en términos de niveles.