“ El retorno de Casanova está considerada como una de las más grandes novelas del siglo XX, y entre sus varias aportaciones se encuentra la original manera en que el autor desarrolla el concepto de soledad. El mismo Farese argumenta que Arthur Schnitzler fue definido, con razón, como ‘un diagnosticador del alma y un terapeuta de la vida’. Pero se disminuiría tal grandeza literaria si no se reconoce su gran cualidad de crítico social. Un crítico imparcial y singular, que vivió y lamentó las contradicciones de su tiempo, y que se propuso reproducirlas y hacerlas evidentes en las situaciones y en los personajes de su magnífica obra”. José Luis Martínez Suárez (autor del prólogo)