La beatificación de Robert Schuman, padre de la Europa unida, en su recta final. Juan Pablo II le ha presentado en varias ocasiones como modelo para los cristianos comprometidos en política. os ideales de la paz y del entendimiento entre los pueblos. Lo que al principio parecía una utopía, Schuman lo fue haciendo realidad con habilidad diplomática y tenacidad irresistible frente al sentimiento nacionalista francés de la posguerra. Su estrecho colaborador, René Lejeune, nos ofrece en estas páginas un testimonio de primera mano de la vida de este gran político, que forjo la Europa actual y es un digno estímulo para quienes desean actuar en la vida pública al servicio de los más grandes ideales.