Para los esqueletos, no es fácil encontrar su sitio en el colegio... En la escuela de los pequeños esqueletos, a veces a Croc-Croc le cuesta ver que la vida es bella. Regañado y castigado por la profesora, señalado con el dedo, Croc-Croc se enfrenta a las burlas de sus compañeros con la calavera baja y los huesos sonrojados. Una excursión a la montaña cambiará la visión que los demás tienen de él ¡y le abrirá las puertas del paraíso! Stéphane Levallois da vida a Croc-Croc , un pequeño esqueleto en sus primeros –y siempre complicados– días de escuela. La obra está destinada a todas las edades.