Manuel Cuenya narra a través de 162 páginas sus aventuras por ciudades como El Cairo, Marrakech, Lisboa, París, Cracovia o La Habana. Sobre la obra Esther Folgueral ha escrito: En este libro de viajes encontramos información, datos útiles, fotografías, pero también el pensamiento del viajero, que resalta la dulzura que le embarga en Lisboa o Marrakech, así como la desazón del París que descubre más allá de sus apariencias.