Hasta hace algunos años, la formación académica orientada hacia la producción de conocimiento y desarrollo de un pensamiento crítico, tenía un lugar relevante en las maestrías de educación. A inicios del nuevo milenio y en un contexto de crisis estructural generalizada, el lugar e importancia que ha tenido ese tipo de formación ha empezado a perder su sentido, como resultado de las nuevas características del mundo educativo (expansión, privatización, acreditación y tecnologización), las cuales han empezado no sólo a sustituir la investigación por la profesionalización, sino a estructurar los currículos más con base en una lógica de mercado que en una lógica académica. El propósito de este libro es argumentar por qué y mostrar cómo se están dando esos cambios, con base en un análisis curricular de 28 programas de Masters de Educación a partir de su denominación, estructura curricular, propósitos y asignaturas relacionadas con Filosofía, Teoría e Investigación Educativa , con las que se asocia la formación académica. El análisis se hace con el apoyo de algunas categorías provenientes del análisis político del discurso, como desestructuración de identidades sociales, sobredeterminación y desplazamiento.
