A uno y otro lado de los Pirineos, catalanes, aragoneses, languedocianos, navarros, gascones y vascos comparten una mitología original de las cumbres, aun cuando algunos de sus aspectos coincidan con otros del vasto conjunto indoeuropeo. Aunque la unidad del macizo pirenaico es indudable, el panteón vasco presenta la particularidad de una autenticidad más marcada y mejor conservada que en otras regiones de la cordillera. En efecto, los mitos, en Euskadi, han mantenido cierto frescor, mientras que en casi todas las demás zonas la folklorización ha hecho sentir su influencia. Las fuentes de este diccionario proceden en lo esencial de las investigaciones etnológicas llevadas a cabo a ambos lados de los Pirineos, de las indagaciones personales del autor y del vasto corpus de cuentos y leyendas, los cuales encierran temas que son resituados aquí en su contexto mitológico. Junto a los nombres de dioses, genios, gigantes, espíritus y demonios, figuran diversas definiciones de ritos, de cultos y de objetos, así como la descripción de los parajes frecuentados por el pueblo (santuarios, etc.): otros tantos elementos que incorporan en su memoria una mitología de los orígenes que los Pirineos han salvaguardado hasta épocas muy recientes. El texto de este diccionario, sexto de la colección ALEJANDRÍA de diccionarios y obras de referencia, viene enriquecido con una abundante ilustración que incrementa aún más su interés y su valor documental.