La manera tradicional de concebir el lugar de trabajo está cambiando. Esto se debe, en parte, a un cambio de mentalidad en el sistema productivo, pues de lo que se trata en la actualidad es de motivar positivamente al trabajador para que realice su tarea de forma más eficiente y para que sea, en definitiva, más rentable. Conceptos relativamente modernos como ergonomía, empatía, motivación, calidad y personalización, están en la base de este cambio. Esta necesidad está dando como resultado un cambio en la forma de enfocar y de compaginar vida familiar y laboral, y ello se plasma en el trabajo de arquitectos y diseñadores para transformar los conceptos de vivienda y oficina convencionales para adaptarlos a las nuevas exigencias.