Frente a la huida de la nación preconizada por buena parte del liberalismo y el republicanismo contemporáneos, este libro sostiene la centralidad de la dimensión nacional para una teoría democrática a la altura de nuestro tiempo. El desafío de estas páginas es proponer al lector un novedoso concepto no nacionalista de nación, que aspira a resultar compatible con los más exigentes requerimientos normativos de la democracia. A tal fin se procede a desarrollar diversos argumentos destinados a superar asunciones, conceptos y supuestas evidencias que se reiteran acríticamente desde el S. XIX hasta nuestros días. En el ámbito de la historia de las ideas, por ejemplo, se explora con detalle la íntima conexión entre Estado y Nación en dos de los pensadores más profundos de la nación y sus intentos de pensar la república en ausencia de la nación (Sieyès), o pensar la nación en ausencia de la república (Fichte).