El Regimiento de Cazadores a caballo de la Guardia Imperial fue la escolta habitual de Napoleón y una valiosa reserva de caballería en batallas decisivas. Una unidad formada por jinetes de probado coraje y, además, de destacadas virtudes morales que deberían servir como ejemplo para el resto del ejército. En este libro se cuenta la historia de los hombres que pertenecieron a esta legendaria unidad cuyos antecedentes se remontan a las primeras batallas ganadas por Napoleón en Italia y en las abrasadoras arenas del desierto egipcio, unos hombres que terminarían pagando el precio exigido por la gloria y la ignominia de la guerra derramando su sangre en los páramos de Austerlitz, las gélidas tierras de Prusia y Rusia o las calles de Madrid, entre otros muchos lugares de recuerdo imborrable. Estos soldados junto a Napoleón, fueron héroes antiguos, de esos que afrontaban la muerte. Su recuerdo habrá que espolear al héroe moderno, ese que afronta una vida en la que ya apenas existe la oportunidad de formar parte de una gloriosa aventura.