Moral judía y moral cristiana (1867), obra del rabino y pensador italiano Élie Benamozagh, una de las voces más destacadas del judaísmo europeo en la seguunda mitad del siglo XIX, ofrece un análisis comparativo y crítico de las contribuciones respectivas del judaísmo y el cristianismo a la formulación de un código ético del alcance universal. Adopta como método la reconstrucción histórica y, sobre todo, el cotejo de las fuentes: los libros bíblicos y la literatura rabínica, por un lado; el Nuevo Testamento, por otro.