La obra papiniana ha tenido tal resonancia y divulgación, que pocos escritores modernos italianos han sido tan traducidos y conocidos en el extranjero. Doscientas traducciones en diversidad de lenguas, entre otras el árabe, el japonés, el chino, el lituano, el maltés y el yiddisch. Póstumo ha aparecido el volumen La felicita dell&180;infelice (1956), que comprende desde los comienzos de 1955 hasta su muerte, e incluye algunos schegge no publicados en el Corriere della Sera, hasta la última, incompleta, Fuoco e neve Fue Papini un extraordinario animador de los movimientos literarios y del pensamiento que han tenido importancia en la historia italiana de la primera mitad del siglo XX, y también un gran maestro de la prosa italiana. Ejemplo, además, de tenaz e increíble resistencia a la desgracia. Poco antes de su fin, clamaba así: &180;&180;Yo muero un poco cada día, según el módulo homeopático, pero espero que Dios me concederá la gracia, a pesar de mis errores, de alcanzar la última jornada con el ánimo entero&180;&180;. Esperanza