El libro que tiene entre sus manos es una amplia colección de ácidos y burlescos diálogos, rebosantes de ironía, cuyo principal fin es entretener. La obra escrita con un humor inteligente aporta una visión renovada de un entorno social, a menudo hostil. El objetivo es el de oxigenar al lector, hacerle ver a través de secuencias cotidianas que no hay juicios ni prejuicios: nada es bueno o malo. El todo es un conjunto de opuestos que no viene con manual de instrucciones. Ante esta realidad, el autor juega con el único arte posible: el humor absurdo.