Las palabras son los embriones de las ideas. Según qué palabras utilicemos asà formaremos nuestro pensamiento. Por eso las que se emplean en la polÃtica, la publicidad, la literatura, el amor... constituyen un elemento de poder, porque pueden moldear la mente de quien las recibe. Muchos intentan dominar esos mecanismos de seducción verbal para asà manipular el pensamiento ajeno. Esta obra analiza con innumerables ejemplos cómo se manipulan hoy en dÃa los vocablos para alterar la percepción que tenemos de la realidad, cómo se emplean su fuerza o su sutileza para engatusar a los demás.