En prácticamente cada país de Europa, miles de personas se vuelven vegetarianas cada semana, España, como destino turístico de primer orden, parecía estar retrasada en este aspecto, ¡pero ya no! Aquí está la prueba positiva de la existencia de una nueva tendencia, compasiva y saludable, no sólo entre la población española, sino también entre sus hosteleos más importantes.