La deslucida corte de Don Juan en Estoril, el luminoso Madrid de la Gran Vía, las barriadas siempre inacabables del desarrollismo franquista constituyen los escenarios de esta historia de lealtades y traiciones, de afectos escondidos e inevitables dolores. Es la España de finales de los sesenta, y la pequeña María sueña con formar parte de una familia que no es la suya. ¿Por qué el ser humano no tiene derecho a elegir a sus propios padres? Esta es la pregunta que parece planear sobre la peculiar peripecia de la niña protagonista, y a esa pregunta no tardan en unirse muchas otras: ¿existe la felicidad?