Kenshín Himura, también llamado Battosai, el asesino, es el más famoso entre los patriotas que contribuyeron a la restauración de Meiji. Se prohíbe a sí mismo matar, por eso utiliza una espada con el filo invertido. Actualmente se aloja en el dojo Kamiya. Toshimichi Okubo, el ministro de interior, le encarga a Kenshín que mate a Makoto Shishio, su sucesor y líder del mundo subterráneo de Kioto. Kenshín decide ir a Kioto, a pesar de la desaprobación general de todos sus amigos, después del asesinato de Okubo a manos de un hombre de Shishio. Rechaza que le acompañe Jaime Saito, un espía de la prefectura de policía. Por el camino se cruza con Misao Makimachi. Los dos se encuentran con Saito en el pueblo Shingetsu, que está ocupado por Shishio. Sojiro, uno de los hombre de Shishio, le rompe la espada a Kenshín durante un combate. Una vez llega a Kioto, Kenshin le pide a Okina, el padre adoptivo de Misa, que encuentre al maestro artesano que había fabricado su espada de filo invertido. Por desgracia, éste ha muerto y su hijo Seiku, famoso por haber heredado el saber hacer de su padre, se niega a fabricar armas.