Tener buena mano en la cocina muchas veces depende de pequeños detalles, de gestos sencillos, que simplifican la labor: pasar las cebollas por agua fría para evitar las lágrimas, lavar la ensalada para que se conserve más tiempo, añadir azúcar a la leche para que no se queme...trucos y más trucos que harán más fácil el ponerse a cocinar.