Tras más de un año de vigencia de la Ley 1/2000, de Enjuiciamiento Civil, empieza a ser ya el momento de analizar sus primeras repercusiones prácticas, indicando las ventajas que ha comportado, así como los problemas que ha generado y las soluciones que, día a día, se van formulando por los tribunales civiles. Es cierto que la nueva Ley ha reportado aspectos muy positivos en lajusticia civil, como sucede con la introducción de la oralidad y la debida inmediación entre el juez y el justiciable; o la implantación del proceso monitorio. Sin embargo, todavía existen aspectos que están suscitando excesivas complejidades: el juicio verbal, el sistema de comunicación de actos procesales, la prueba pericial, el recurso extraordinario por infracción procesal o la ejecución provisional, por citar sólo algunos ejemplos. Para someter a debate las distintas experiencias de los operadores jurídicos que se encargan de su directa aplicación, en diciembre de 2001 se organizó el IV Congreso de Derecho Procesal en la Universidad Rovira i Virgili con el título Aspectos prácticos del nuevo proceso civil. Experiencias de su primer año de aplicación, con la intervención de diversos Profesores, Magistrados, Abogados y Secretarios Judiciales.
