En la década de los ochenta, Alpha, un adolescente negro de quince años, huérfano de madre y sometido a la rígida autoridad de un padre arisco y desengañado, es testigo y víctima de la limpieza étnica emprendida en Mauritania, por la etnia árabe contra la minoría negra que habita el sur del país. El abrazo de Fatma es a la vez una historia de amor y de desesperación; de añoranza materna y de rebeldía contra los imponderables sociales. Sitúa a los protagonistas ante la trágica tesitura de rebelarse sin posibilidad de victoria o aceptar resignadamente la humillación de verse desposeídos poco a poco de sus tierras y de su dignidad. Alpha, con su impulso adolescente se ve empujado por un camino distinto al de su desengañado padre. León Moré , gran conocedor de la realidad mauritana, plantea en el Abrazo de Fatma un dilema universal con una intensidad digna de la tragedia griega y una espeluznante actualidad.