Lágrimas de veleta es una obra primeriza que, además de las experiencias vitales de su autor, bebe de dos fuentes literarias muy concretas: Sobre los ángeles , de Rafael Alberti , y Poeta en Nueva York , de Federico García Lorca . De ambas procede el tono general, de carácter surrealista, del poemario. La primera le proporciona el modelo estructural adecuado, mientras que el surrealismo más auténtico de Lorca le da la densidad y el relieve al contenido. Estas lágrimas luchan contra su debilidad congénita, propia de una época plagada de desconciertos vitales, de búsquedas de identidad, de sentimientos contradictorios que contribuyen a articular un ejercicio de autocrítica que no excluye, en determinados pasajes, la práctica de un masoquismo que intenta ser catártico y por medio del cual el autor pretende superar los traumas que jalonaron su adolescencia y parte de su camino hacia la madurez.