Éste es el relato en primera persona de Alan, un agresor homosexual que abusó de unos mil niños, y por ello se pasará el resto de su vida en la cárcel. Mediante una serie de cartas a la doctora Amy, una terapeuta que también sufrió los abusos de su abuelo y su padre en la infancia, Alan contará como piensa y actúa la mente de un pederasta y nos mostrará que cualquier lugar, nuestras escuelas e incluso nuestras casas, se puede convertir en el sitio más inseguro para nuestros hijos.