HOMBRE DE PAREDMe he arrancado un ojoy lo he clavado en la paredpor si así consigo verme.Todo lo que he apreciadoes una mancha informecasi un humo de perfilestan afilados que alcanzanese punto exacto de los rincones. Me pregunto si seré ahora la pared,inevitablemente sí.Observo con mi ojo de paredcómo lo impregno todo,cómo soy el mismo universosolo que pronunciado de otra forma.Pero aun así las sombrascobran vida al manchar el muroy no puedo llevarte de la manohasta mi mano de pared,los techos se desplomancuando no puedo repetirle tus palabrasa mis oídos de pared,y las venas me rompen la piely los suelos se agrietancuando olvido mostrartemi nombre de pared. Quizá el auxilio de la inmovilidad,o el paisaje de una ruinapueda salvarme levementemientras mantenga, sin tregua,esta batalla contra los espejos. Pequeña resistenciade arena, de Alfonso Berrocal. Ediciones Vitruvio, número 866 de laColección Baños del Carmen.