El equilibrio entre la pureza y la corrupción. El astillero forma parte del ciclo narrativo de Santa María, el espacio mítico de Onetti . En la presente novela, el protagonista regresa a la ciudad que le expulsara de su seno, a un astillero desierto, espacio corroído de depredación y deterioro, alegoría de la condición humana que es o puede ser a la vez la alegoría de un país y un tiempo concretos. «Entre sus novelas, probablemente, es la más equilibrada, la más perfecta...» Antonio Muñoz Molina .