La narración se desarrolla entrelazando tres ejes: los efectos de la enfermedad de Alzheimer, la vida de la protagonista y la relación de la enferma con su nieta. Paquita, la protagonista, es una anciana que vive el proceso de la enfermedad: la pérdida de memoria y la consecuente desorientación hacen que primero se pierda por la ciudad, después por su casa y acaba perdiéndose incluso a sí misma. Recuerda la historia de su vida pero el desconcierto mental la lleva a confundir personas y situaciones. Recuerda la infancia, el amor, el tormento del primer marido, los hijos. Todos están muertos, pero ella siente que convive con ellos. Eugenia, la nieta, vive la degradación de su abuela, siente su propia impotencia para ayudarla y vive un periodo de alejamiento de su propia vida. La enfermedad afecta a su abuela y también a las personas que la rodean.