Termeer decide poner por escrito los hechos que lo han llevado a asesinar a su esposa, pensando que tal vez alguien algún día se verá reflejado en él al leer estas páginas. Un clásico de las letras neerlandesas y la obra maestra del escritor y dramaturgo Marcellus Emants (1848-1923). PRÓLOGO DE J.M. COETZEE.