A finales del s. XIX, numerosos españoles se embarcaron hacia el Nuevo Mundo en busca de un modo de vida que colmara sus ilusiones. Y esa es la historia de José DÃaz Ouro, un gallego de 35 años, viudo y con un hijo, que llegó a Buenos Aires en 1880, en un momento clave para Argentina, en el que figuras legendarias como Yrigoyen, Durruti o Carlos Gardel definÃan el espÃritu de una época y de una ciudad apasionantes.