Ni artículos ni cuentos, sino todo lo contrario… Articuentos deben llamarse estos textos, fruto de una conciencia literaria siempre crítica, que fueron publicados en la prensa como artículos de opinión, pero que por su forma se acercan a la ficción, la fábula o el microrrelato fantástico… Escritos inusuales que constituyen una batalla sin cuartel contra la costumbre, con la idea de mostrar una realidad conocida –a veces maravillosa, a veces llena de absurdo y horror– como si la viéramos por primera vez… Una muestra de la ya indispensable literatura periodística de Millás .