En plena lucha por la supervivencia del periódico Rheinische Zeitung, del que era director, Karl Marx tomó, a fines de 1842, la decisión cargada de consecuencias de romper con la fracción berlinesa del movimiento neohegeliano. Esta ruptura constituye un primer paso en su evolución del liberalismo renano al socialismo. Es exactamente contemporánea de la serie de artículos sobre el robo de madera, que en este libro comenta Daniel Bensaïd, y anuncia los manuscritos de Kreuznach (verano de 1843), en los cuales Marx ajusta sus cuentas con la herencia de la filosofía hegeliana del Estado.