Clara Ribalta, durante ventiocho años, es la hermana Nazaret dentro de un asilo de ancianos en Córdoba. Después, un deslumbrador desspiritual de esa mujer, que vive y ama hasta la muerte y más allá. El amor es el alimento único de su cuerpo y de su alma. En muchasue se entrega con la entrega del cuerpo; el amor franciscano a todas las criaturas y, sobre los demás, el amor a los ancianos, que clos hombres en Dios: hay que amar a Dios en los hombres; que los otros no son el infierno: los otros son precisamente Dios. Y le ha empresa en la que todos hermos de participar. Y le ha permitido intuir que nuestro universo no fue creado de una vez; que ha de recses del Tentador en el Paraíso no fue una vana falacia. Situada en esas afueras, se mueve Clara a los impulsos de su corazón. Has Un mundo palpitante, apasionado, lleno de deterioros, de esperanzas y desesperanzas, de nostalgias del pasado y afirmaciones del ppor incontables personajes que se agitan, se oponen, se funden, se desencuentran o se encuentran, aparecen y desaparecen, inolvidabl p róximo. Un mundo que dejaría de existir si dejara de existir el amor.