Los aventureros padres de las hermanas Ugajin se han largado en busca de nuevas emociones, dejando en casa solas a las tres chicas. Yuri, Nobara y Ran ya están empezando a desmadrarse celebrando la marcha de sus padres cuando les interrumpe un anciano que no porta buenas noticias. Ha prestado 50 millones a los Ugajin para su viaje y ¿a quién le toca pagar? A ellas. Deberán trabajar en el Instituto Manten ayudando a proteger la escuela de las acciones y peleas de bandas o de gente de dudoso pasado. Las cosas empiezan a complicarse cuando a la hermana menor, Ran, le toca vigilar a Yûdai Araki, un atractivo matón que sembró el terror durante la escuela media. Chico que no la deja precisamente indiferente.