Envidia te tengo, lector, por el maravilloso día que te aguarda sumergiéndote en la lectura de estos Cromos de películas de Juan José Plans. Desde los piratas a los artistas, pasando por una larga lista en que no faltan cromos del Oeste, de espías, de misterio, románticos y de dibujos animados (por citar sólo algunas de las parcelas temáticas abordadas en el libro), Plans nos habla de su afición por los álbumes de estampas, aquellos mitológicos viveros de imágenes donde aprendimos casi todo lo que sabemos y que atesoran en sus páginas los temblores y las dulzuras inolvidables de la infancia. Recordándose niño, y siéndolo en su alma todavía, Juan José reconstruye una época, un mundo, un siglo, a partir de un puñado, bastante numeroso, de álbumes de cromos que aún obran en su poder (o en colecciones de amigos próximos) y que aparecen reseñados en la útilísima cromografía que clausura el volumen. Al cabo, la reconstrucción de Plans nos llena la cabeza de ternura, nos alivia la mente con su capacidad evocadora, nos cura de melancolías con su nostalgia alegre y erudita. Luis Alberto de Cuenca