Gracias al magnetismo de su rostro se convirtió en uno de los actores más destacados de Hollywood. De sus primeras obras son dignas de mención Un tranvÃa llamado deseo . A finales de los años cuarenta se instala en la Meca del cine, Hollywood. Allà interpretó La ley del silencio, ¡Viva Zapata! o Julio César , entre otras. El público puede admirar de nuevo su profesionalidad en una magistral interpretación en El Padrino . Otra de las pelÃculas que rueda en este tiempo y provoca una fuerte atracción entre el público es El último tango en ParÃs. Ante la llegada de los ochenta anunció su retirada de la gran pantalla. No obstante, desde entonces ha vuelto a intervenir en algunas producciones. En la actualidad vive en la isla de Tahità de su propiedad. En los últimos años sus problemas familiares, debido al suicidio de su hija y el encarcelamiento de su hijo por asesinato han mermado su salud.