El singular testamento de Eutimio Basarán, cacique carlista del vallemás ignoto del Pirineo, activa una trama disparatada en la quese entrecruzan—desde lugares tan diversos como Pamplona, Huesca,Cienfuegos o Barcelona—curas integristas, monjas emprendedoras,fervorosos anarquistas, inventores entusiastas, astrónomosaficionados y políticos corruptos. Entre todos construyen,transitando entre dos siglos, una alegoría en donde la ciencia yla religión, los gobiernos y los movimientos sociales, la razón y lasuperstición, se manifiestan como pares antagónicos que pugnanpor anularse mutuamente: cien años de esfuerzos para edificar laEspaña nula. Y vuelta a empezar.