Aunque Friedrich Hölderlin concibió toda su obra poética, al modo de los rapsodas griegos, como un canto (Gesang), utilizó también ese término para designar unos determinados poemas tardíos: los que escribió entre mayo de 1801 y diciembre de 1803. Pero la novedad que entrañan los cantos es más de fondo que de forma. El nuevo estilo (neue Sangart), señala Antonio Pau-autor de esta edición-, se caracteriza por tres rasgos: los poemas están impregnados de un tinte memorialístico, adoptan un tono elevado, abundan las afirmaciones gnómicas o aforísticas.