Subh Um Walad, la señora, favorita del califa Alhaquen y madre del califa Hixem, fue seguramente el personaje más singular y apasionante del esplendoroso período del Califato de Córdoba. Originaria de los reinos cristianos del norte, bella, inteligente y cultivada, tuvo que vivir la realidad de palacio, sometida al regimen propio del haren, junto a las concubinas y los eunucos. Pero se rebeló contra este destino y se convirtió en alguien determinante dentro del complejo ambiente familiar de la realeza omeya que residía por entonces en Medina Azahara. Cuando a finales del primer milenio, Abuámir Almansur se halla en lo más alto de su poder y se lanza a su energica campaña final para conquistar todo el Norte y destruir definitivamente los reinos cristianos, el invulnerable personaje ignora que a sus espaldas se está fraguando una conspiración que intentará torcer el rumbo de la Historia, Subh Um Walad, la señora, decide romper definitivamente con su encierro en los Alcázares y regresa a Medina Azahara, la ciudad de los califas, para liderar junto a su hermano Eneko un heterogeneo grupo formado por curiosos personajes, pero nada es lo que parece y todo se confunde en aquella metrópoli única y luminosa a la vez que delirante. Es una epoca de exuberancia creadora y
