La vida de Carlomagno es enormemente atractiva porque fue un líder carismático que tenía una personalidad fascinante y arrolladora, lo que le permitió ejercer una realeza singular. El emperador era vitalista y poseía el don innato de mandar y gobernar, tal vez como jamás lo haya poseído otro personaje histórico. El imperio carolingio fue el núcleo originario de Europa. Carlomagno, el padre de Europa, es un prototipo de rey tan guerrero como sabio. Su obra pervive actualmente. Esta biografía suya es una obra de fácil y amena lectura, en la que Carlomagno aparece redivivo, situado en la sociedad de su época, con las personas de su entorno, y en los países y lugares que estuvo.