Madrid, 1956, Javier, Amando y Horacio , coinciden en un proyecto descabellado : filmar una película contra la pena de muerte en pleno franquismo. El rodaje clandestino constituye uno de los episodios más insólitos y poco conocidos de la historia del cine español. Con un estilo ágil y directo, el autor disecciona varios ángulos de nuestra sociedad mediante pinceladas literarias cargadas de crítica e ironía , de las que no queda fuera la propia novela.