“Para los escritores ha sido siempre fundamental la presencia de los llamados hombres-literatura, es decir, de aquellos seres que dedican sus vidas, con una vocación casi mística, a desentrañar los misterios que la palabra escrita genera. Sin ellos, los escritores quedarían desorientados, perdidos en sus propias contradicciones. En este libro vemos un ejemplo perfecto de cómo Philippe Ollé-Laprune, con absoluta simplicidad y al mismo tiempo con un manejo profundísimo del hecho literario, se erige en el guía necesario que todo aquel que se sumerja seriamente en el mundo de la literatura necesita.” Mario Bellatin