En junio de 1655 es detenido en París Michel Millot, acusado de la autoría de un libro contrario a las buenas costumbres titulado LÉcole des filies. Millot es condenado a morir en la horca erigida en el mismo lugar donde se quemen los ejemplares del libro. La sentencia no llegó a ejecutarse, pero todos los ejemplares de la obra fueron retirados de la circulación. Sólo gracias a algunas copias enviadas a Holanda y conservadas en el Infierno de la Biblioteca Nacional de Francia, ha podido llegar a nuestras manos una de las obras maestras de la literatura libertina. Dos primas mantienen una conversación sobre hombres en la que la iniciada, sin artificios sentimentales y con una actitud descaradamente libre de prejuicios, intenta convencer a la bisoña de las bondades del placer sexual. Con ser una obra de gran interés literario, el valor más perdurable de Escuela de doncellas es su capacidad de inquietar al lector merced a la simple elevación del deseo de la mujer a norma suprema de su moral sexual.