El lenguaje y el habla son fenómenos complejos, que hacen de sus trastornos fenómenos igualmente complejos. Este es el caso de la disfamia o tartamudez que ha venido manifestándose de forma sistemática como una de las perturbaciones más rebeldes e inciertas de la patología del lenguaje. Los avances respecto a su rehabilitación, han sido tímidos, incluso escasos, lo que la convierte en uno de los grandes retos de la Logopedia. El libro pretende dar una información precisa y puntual sobre la tartamudez, e incluye instrumentos para registrar las manifestaciones del trastorno. Recoge, asimismo, las técnicas, los procedimientos y las estrategias necesarias para prevenir y/o habilitar el habla de los sujetos con esa problemática.