Décimo quinto volumen de losdiarios del autor, Salón de pasosperdidos Pueden estar tranquilos los lectoresde estos libros, y desde luego muchomás aún los que no los han leído nunca,pero gustan hablar de ellos comosi lo hubieran hecho: ni acabarán devorandoa su autor ni éste se ha vueltoloco. A todo lo más que ha llegado éles a lo que el griego llamó, con sumadelicadeza, la manía, una forma de?entusiasmo?. [...] La manía de escribirestos libros no se entiende sin lamanía que algunos tienen de leerlos eincluso de no hacerlo.