Osho nos presenta la compasión, como valor último, en contraposición a la pasión. Para Osho, pasión y compasión son dos formas distintas de una misma energía y la meditación es la clave para distinguirlas. Sin meditación, la energía se convierte en pasión, que es lo mismo que lujuria y egoísmo. Con meditación, en cambio, la misma energía se convierte en compasión, en espiritualidad. Una tema nuevo que despertará la curiosidad entre los seguidores de Osho y demás lectores con inquietudes espirituales.