Dentro de la obra de Ramón Gómez de la Serna , Senos (1917) tiene un significado muy especial: por un lado, es uno de los títulos más sugestivos entre sus misceláneas, compuestas de breves fragmentos que asedian un único tema, estrategia que dio títulos como El circo , El Rastro o Gollerías ; por otro lado, es uno de los monumentos de erotismo español (largo tiempo prohibido durante el franquismo) y uno de los más turbadores acercamientos al particular fetichismo ramoniano.