Hacia otra España , se divide en tres secciones: Páginas sueltas analiza causas de la decadencia española: la falta de oportunidades, de proyectos y de profesionalidad. Su crítica es más dolida que satírica, aunque seguidora de Larra. La segunda sección, De las guerras, se centra en la de Cuba, consentida por los políticos y la prensa irresponsable. España pagó su torpeza ante una potencia superior, la América anglosajona. La tercera sección, Hacia otra España, asociaba su progreso a una prensa eficaz, a una burocracia ágil y a un desarrollo industrial, no separatista. Se distancia Maeztu de la visión idílica castellana, propia del 98. Su apuesta por una industrialización, realizada por hombres de negocio, lo aproxima a un capitalismo no estatal.